ÚLTIMA HORA

[OPINION] CONDENADO CHEYRE: LA CAÍDA DEL “NIÑO SÍMBOLO” DE LA TRAICIONADA TRANSICIÓN

16.11.2018 00:05

Condenado Cheyre: la caída del “niño símbolo” de la traicionada transición

La transición chilena a la democracia ha sido una claudicación tras otra frente a los militares golpistas de 1973. Lo fue tras el triunfo del NO en 1988, cuando los militares estaban derrotados políticamente y era la oportunidad para ponerse firmes y no transar. Pero se optó por el camino de la “transaca”, de hacer maquillajes a la Constitución de Pinochet y de dejar incólume el modelo neoliberal. Lo fue durante todo el gobierno de Aylwin (un pro-golpista) quien en vez de apoyarse en el pueblo que se sentía empoderado tras ganar el plebiscito, cada vez que tomaba una decisión la consultaba con Pinochet, con la ayuda del fiel amigo de los golpistas, Enrique Correa. (Sobre este punto, invito a leer “La Historia oculta de la transición”, de Ascanio Cavallo, donde cada página es una vergüenza tras otra por el entreguismo y la genuflexión mostrada por la Concertación frente a los golpistas).

Hoy acaba de conocerse que el ex Comandante en Jefe del Ejército, Juan Emilio Cheyre, fue condenado a tres años de libertad vigilada, por encubrimiento de los crímenes de la Caravana de la Muerte, el mismo uniformado por el cual muchos líderes de la ex Concertación rasgaban vestiduras y ponían las manos al fuego defendiendo fanáticamente su inocencia.

La ciega defensa de Cheyre por altos dirigentes de ese conglomerado político tiene una explicación. Según publicó Emol el 2001 y “El Siglo” el año 2002, Cheyre, como agregado militar de la embajada de Chile en España, organizó en el Hotel Victoria Plaza de El Escorial, en Madrid, en 1996, un encuentro entre dirigentes socialistas chilenos y representantes del mundo militar afines a Pinochet. En la reunión, ambas partes venían con una carta en la mano: los socialistas, entre los que se encontraban el embajador Álvaro Briones, el entonces ministro de Obras Públicas, Ricardo Lagos; Jaime Gazmuri, el inefable Enrique Correa, y Camilo Escalona querían que Lagos fuera Presidente. Por la otra parte, estuvieron Cheyre, los oficiales del Ejército Carlos Molina Johnson, José Miguel Piuzzi y Jaime García Covarrubias; y los representantes de la centro-derecha, Hernán Felipe Errázuriz, Sergio Rillón (asesor del general Pinochet), el filósofo Fernando Moreno, y el diputado Luis Valentín Ferrada estaban interesados en que Pinochet pudiera continuar su carrera política como senador designado, sin ser molestado por las violaciones a los derechos humanos durante su dictadura.

Ambos bandos llegaron a un acuerdo en estos dos puntos y la “guinda de la torta” fue concordar que Cheyre fuera nombrado Comandante en Jefe del Ejército, con el explícito propósito de que sería el “niño símbolo” de este acuerdo, llamando al Ejército a un “nunca más”. Este llamado elevaría a Cheyre a ser un “hombre de Estado”, inmaculado, perteneciente a una nueva generación, que miraría por el bien del país y mejoraría la pésima imagen del Ejército en el pueblo chileno.

Brindis, “salud” y el acuerdo quedó hecho. Después, Pinochet llegó al Senado y Lagos fue elegido Presidente.

Pero había un “pequeño” problema con Cheyre. En el 2002, cuando Lagos lo nombró Comandante en Jefe, ya había denuncias contra él por su participación en la Caravana de la Muerte en La Serena. Lagos, Correa, Escalona, Gazmuri y varios otros próceres socialistas miraron desde entonces para el lado. Defendieron al cómplice de los victimarios en vez de defender a las víctimas socialistas, entre ellos el profesor Jorge Peña Hein, insigne fundador de las Orquestas Juveniles, y los militantes del PS Marcos Barrantes Alcayaga y Mario Ramírez Sepúlveda, asesinados por la Caravana; mientras, además, otras víctimas denunciaban a Cheyre como partícipe en los interrogatorios con torturas. Cheyre también tuvo un rol protagónico en el traslado a un convento de un bebé de sólo dos años, Ernesto Lejderman, hijo de un argentino y una mexicana, fusilados también en La Serena en 1973. Pero siempre dijo que “no sabía nada” y que “cumplía órdenes”.

Las razones de tan férrea defensa de Cheyre por parte de los dirigentes socialistas ha sido explicada de la siguiente brutal manera: era fundamental conseguir de un Comandante en Jefe del Ejército el compromiso de un “nunca más”, es decir, nunca más los militares deliberando, metidos en política, dando golpes de Estado y asesinando a su propio pueblo. Esas son “razones de Estado”, la “política mayor” que le permitiría al país superar el trauma de la dictadura y mantener a los uniformados en los corrales de los regimientos. No importa el “daño menor” o los “efectos colaterales”, -como la impunidad, en los secuestros, torturas, asesinatos y desapariciones- esas son nimiedades comparados con el importante y trascendente valor del juramento democrático del Ejército.

Incluso, si Cheyre mismo estaba “manchado” por la Caravana de la Muerte, éste “sólo era un pelao de bajo rango”, un “suche”, “un joven teniente sin ningún grado de mando ni poder en las filas”, “él sólo cumplió órdenes”. Pero lo importante, recalcaban sus fanáticos defensores, es que “tiene una mirada de futuro”. (Sin embargo, si él era inocente, nunca denunció lo que supuestamente vio sólo como simple testigo. Nunca acusó a nadie. Guardó silencio durante 40 años. ¡40 años! Un ejemplo claro de que participaba de los “pactos de silencio” del Ejército).

Pero la verdad se impone. Después de un largo juicio llevado a cabo por el valiente juez Mario Carroza, Cheyre –el niño símbolo de la traicionada transición- ha sido condenado por encubrimiento de los 15 brutales asesinatos cometidos por la Caravana de la Muerte en La Serena. Fue condenado a pesar del intenso lobby político por salvarlo. Es el castigo a la grotesca farsa de la “política de los acuerdos”. Y en su condena judicial, arrastra consigo también en una pesada condena moral a todos aquellos dirigentes del PS y de la Concertación que lo defendieron a rajatabla, incluso, olvidando a los propios militantes socialistas muertos ante la pasividad de Juan Emilio Cheyre. Su condena es también una condena a la transición traicionada. 

* Diario Quinta.cl - Gato Deq

CON SANGRE MAPUCHE SE ESCRIBE “PLAN ARAUCANÍA”

15.11.2018 15:30

Con sangre Mapuche se escribe “Plan Araucanía”

Con sangre Mapuche se escribe “Plan Araucanía”. Desde Puelmapu escribe Mauricio Nilian Comparte este artículo “Nosotros con plena seguridad decimos, su estrategia, carece de sentido y proyección política, pues en política, el pueblo mapuche a demostrado en los hechos que está dispuesto a seguir defendiendo sus fuerzas espirituales del territorio y sus espacios ancestrales que aun habita y si podemos ampliar campos recuperados se seguirá en ese plan estratégico”.

 

A menos de un año de asumido el payaso de turno en el gobierno $hileno, Sebastian Piñera, el latifundio y los grupos hegemónicos de la economia, elaboran un plan sistemático para ampliar sus horizontes económicos en territorio Mapuche, al que llaman “Plan Araucania”.

Nadie puede pensar, con la excepción de socialistas y aliados, que este plan haya sido hecho en unos días apenas asumió el “pinochetismo democrático” (Marzo de 2018), este plan es una respuesta elaborado desde el gobierno de Bachelet, ante el rotundo fracasos de la operación “Huracán”, un plan al que llamaron de “inteligencia”, con el fin de amedrentar y generar terror en las comunidades Mapuche organizadas, consistente en encarcelar a dirigentes públicos mapuche de distintos territorios, con el argumento que constituían una “CÉLULA TERRORISTA”, nada nuevo bajo el sol, casi 30 años queriendo e insistiendo con la “GUERRILLA MAPUCHE”.

Desde el empresariado, el Estado con todas sus instituciones, incluida la iglesia y lógicamente los MEDIOS DE COMUNICACIÓN DE MASA, han emprendido infinidad de alternativas represivas para generar miedo en nuestra Nación oprimida y sin embargo uno tras otro fracasan, pues se diluye permanentemente esa “hipótesis” de conflicto bélico al interior de $hile, lo único que existe es una voracidad sin límite de las empresas, hidroeléctricas, pasteras y madereras que necesitan seguir ampliando sus inversiones a costa de anular la resistencia Mapuche.

En este contexto, se consensua el “Plan Araucania” presentado por Piñera en septiembre, que consiste en apariencia, en fomentar inversiones y mejoras económicas para la 8va, 9na y 10ma región, regiones históricamente de habitat Mapuche, para lo cual, evidentemente no se consulta ni se requiere de la participación de nuestro pueblo en dicho “plan”, pero eso si, se requiere de representantes “CÓMPLICES” del fraude político que den una imagen de unidad entre el Estado y el pueblo Mapuche, por lo menos en la foto. Misteriosamente, en Julio de este año, el gobierno presenta el “Comando Jungla”, un equipo especial de represión al pueblo Mapuche, lo más parecido a un “Escuadrón de la muerte” versión $hilena.

Y por que decimos ¿“misteriosamente”?, porque solo a un imbécil se le puede ocurrir que el gobierno Socialista de Bachelet, no tomo parte en este nuevo avance de la “pacificación de la araucania”, es evidente que este comando de la muerte, ya estaba siendo procesado antes de la asunción de Piñera, un grupo de aproximados 50 agentes, eran formados en escuela de antiguerrillas en Colombia y EEUU, con nuevos contingentes que seguirán haciendo esos cursos de adiestramiento para ir ampliando estas fuerzas represivas en territorio Mapuche.

Es falso que Piñera aumenta la militarización en territorio Mapuche, ese es un discurso de los políticos de la “izquierda” panfletaria $hilena, que usan a la ultraderecha para hacer política de votos, pues la militarización del territorio Mapuche es una constante desde el inicio del proceso “democrático”, Democristianos, socialistas y derechistas se han sucedido en el gobierno y ninguno a dejado de aumentar los presupuestos militares para la defensa del empresariado en las regiones de lucha Mapuche.

Drones, nuevas bases de policía militarizada en zonas de comunidades, allanamientos ilegales, operativos y montajes, etc. todo este plan sistemático responde a una sola ley marco que es, definir a la resistencia Mapuche como un “FOCO DE TERRORISMO”, lo digan o no lo digan, es el sentido con el que se mueve la política $hilena en estos últimos 30 años, por este motivo, la cantidad de jóvenes Mapuche asesinados se cuenta por decenas. El “Comando Jungla” es la base del “Plan Araucania”

La verdad, el “Plan araucania” no presenta nada nuevo en función de los intereses de los colonos latifundistas e inversionistas de la región de la Araucania, simplemente es una carta de intención, sin embargo, el Comando Jungla si es un avance para las clases dominantes $hilenas, es la política practica y concreta que demandan los grupos del poder, es más, me atrevería a sostener que incluso si este “Escuadrón de la muerte” sigue avanzando, los políticos hasta pueden cambiar su “Plan Araucania” y redactar uno nuevo en base a las críticas de “inconsulto” a las comunidades Mapuche y nada va a cambiar, pues, por más que intervengan las comunidades o sean consultadas, la figura política de “proyectos de ley” del Estado empresarial $hileno, no es más que una MASCARA con la que juegan a la democracia los políticos farsantes, pues el sentido real de sus discursos de izquierda y derecha, es ganar espacio de poder en sus carreras políticas, no les interesa el avance de la “GUERRA SUCIA” contra la población Mapuche Organizada.

Engañan al pueblo y a los Mapuche que les creen a algún “figurin” progre de “izquierda” mientras las calles y los campos están gobernados por la policía militarizada, ósea, pan y circo para entretener la perdiz, palo, cárcel y muerte, para garantizar el modelo colonial. En conclusión, hoy nos asesinan a un Peñi, Camilo Catrillanca (24 años), para demostrar que su “Plan Araucania” (llámenle como le quieran llamar), va a seguir avanzando.

Ante esto, nosotros con plena seguridad decimos, su estrategia, carece de sentido y proyección política, pues en política, el pueblo mapuche a demostrado en los hechos que está dispuesto a seguir defendiendo sus fuerzas espirituales del territorio y sus espacios ancestrales que aun habita y si podemos ampliar campos recuperados se seguirá en ese plan estratégico, ellos en 30 años no tienen ARGUMENTOS POLITICOS han sido derrotados por una sabiduría mucho mayor a su limitado pensamiento winka eurocentrico e incapaces de proponer debates superadores, apuestan a la BALA y la POLÍTICA que pueda generar, y es todo lo contrario, NUNCA FUIMOS SOMETIDOS POR LA VIOLENCIA, no hemos sido regidos por reyes, ni sometidos por extranjeros ni mucho menos por una burda provincia de los yanquis llamada $hile, la lucha mapuche tiene sentido y sostenimiento en un pensamiento propio y milenario, la política de los partidos del poder del Estado Opresor a fracasado una y otra vez, ellos necesitan INVENTAR estrategias de sometimiento, pero no les nace ninguna idea nueva, el asesinato de pu peñi pu lamgen no es argumento para derrotarnos, sus oídos no escuchan que somos semilla, cada vez que volvemos a la tierra, nacemos 10 veces vencedores y más fuertes, eso es hacer política, no aquello que llaman “democracia” que es un nido de ratas discutiendo por un sueldo, mientras los empresarios gobiernan y dirigen el país desde afuera.

AMULEPE TAIÑ WEICHAN CAMILO CATRILLANCA…NEWEN TULEIMI PEÑI, CHALTU !! TU MUERTE NO FUE EN VANO! MARRICI WEU MARRICI WEU !!

Naguil Antu 14 nov 18 

* Mapu Express - Mauricio Nilian Educador Intercultural Mapuch

<< 91 | 92 | 93 | 94 | 95 >>