Salvador Allende Gossens  Salvador Allende Gossens

Grandes en la historia de la lucha de los pueblos.

Salvador Allende fue el presidente que intentó instaurar el socialismo en Chile por la vía democrática. Nació en 1908, en el seno de una familia de la alta clase media de Valparaíso: su abuelo fue médico y su padre abogado. Desde su época de estudiante en la Escuela de Medicina de la Universidad de Chile, mostró su vocación por el servicio público.

En 1929 integró el grupo político universitario Avance y en 1933; su vocación política lo llevó a ingresar al Partido Socialista. Fue elegido diputado y senador de la República, asumiendo luego como presidente de la Cámara. Cuando se fundó el Partido Socialista de Chile, Allende, con 25 años de edad, fue su primer secretario regional.

Allende participó activamente en los movimientos universitarios de la época, siendo presidente de los alumnos de medicina en 1927 y vicepresidente de la Fech en 1930..

Médico y socialista poseía el perfil característico del político chileno progresista y laico de la primera mitad del siglo XX.

Triunfó en su cuarta postulación y accedió a la primera magistratura apoyado por una agrupación de partidos de izquierda, la Unidad Popular. Por primera vez en la historia, y causando expectación en el mundo entero, un político socialista y marxista llegaba al gobierno a través de la votación popular.

Salvador Allende encabezó el proyecto que buscó instaurar el socialismo por la vía democrática. Su programa de gobierno contempló la construcción de un Estado popular y una economía planificada de corte estatal. La formación de su conciencia política, el ejercicio de su profesión de médico en el Valparaíso de los años treinta, su protagonismo en la fundación y expansión del Partido Socialista, su papel como ministro de Salud, su trabajo como senador durante un cuarto de siglo, su visión del mundo en los tiempos de la guerra fría.

Una especial atención merece su labor como presidente durante esos tres años que atrajeron la atención mundial. Además, y gracias a veinte testimonios, el autor penetra en la vida familiar de Allende, en sus relaciones de amistad, en sus costumbres

“Trabajadores de mi patria: Tengo fe en Chile y su destino. Superarán otros hombres el momento gris y amargo, donde la traición pretende imponerse. Sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, se abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre, para construir una sociedad mejor.” ¡Viva Chile, viva el pueblo, vivan los trabajadores!

Serían las últimas palabras que pronunciara Salvador Allende, antes de que El Palacio de la Monedad fuera abatido por las fuerzas aéreas y terrestres chilenas, encabezadas por el genocida de Augusto Pinochet en el año de 1973.

 

Entrevista del periodista Saul Landau al Presidente Salvador Allende